En sus inicios, la formación e-learning se convirtió en la alternativa a la formación tradicional, pero actualmente los objetivos y estrategia de una empresa e-learning, está siendo muy distinta.
Conocedores de las ventajas que los cursos online tienen respecto a la flexibilidad en cuanto a horarios y ritmo de aprendizaje, la formación e-learning seguía el proceso normal de aprendizaje-titulación-capacitación para ejercer o desarrollar el trabajo relacionado con esa formación. Aunque la flexibilidad aún siga siendo una ventaja competitiva, más si cabe, en una rutina diaria con una carga horaria elevada como la que se vive actualmente, no parece ser suficiente.
La realidad nos muestra que la formación ha dejado de ser un aspecto estanco o permanente, puesto que un mundo tan variante e innovador como el actual exige un reciclaje continuo para afrontar todos los desafíos profesionales. Tanto a la hora de acceder al mercado laboral, como de adaptarse a las novedades de cada sector o escalar a posiciones de mayor responsabilidad, no basta ya con una titulación en un momento puntual. La mejora constante ha dejado de ser una ventaja competitiva para convertirse en un elemento actualizador.
Adelantándose al aprendizaje moderno, las empresas de e-learning han comenzado a virar en la definición de sus objetivos y estrategias en ese sentido, no solo innovando en las tecnologías de aprendizaje, sino poniendo el foco hacia los nuevos modelos de aprendizaje.
En iEditorial consideramos que entre los objetivos y estrategia de una empresa e-learning podemos encontrar las siguientes.
El alumno como centro de la estrategia: una vez mas
El futuro de la formación e-learning nuevamente tendrá un carácter alumno-centrista. La innovación tecnológica o el uso de nuevas metodologías de aprendizaje no tienen sentido si no es para conseguir la plena satisfacción del alumno y contribuir a su reciclaje profesional o a facilitar su acceso al mercado laboral.
La personalización jugará un papel destacado entre los objetivos y estrategia de una empresa e-learning, por lo que, es necesario sacar el mayor rendimiento de los recursos que la tecnología permite para adelantarse a las necesidades formativas de los alumnos. Una experiencia de usuario de última generación será vital para conseguir la plena satisfacción del alumno y mejorar su crecimiento personal y generar grandes dosis de motivación, lo que hace destacar aún más la importancia a la hora de elegir la plataforma e-learning más innovadora.
El aprendizaje informal: una oportunidad estratégica
Las posibilidades que la formación e-learning ofrece en cuanto a potenciar las interacciones sociales en el aprendizaje es uno de los objetivos y estrategia que una empresa de e-learning debe potenciar.
Conceptos como debatir, analizar, argumentar, deliberar pueden ser la clave en el futuro de la formación e-learning. Son muchos los estudios que ponen en énfasis como el aprendizaje informal contribuye a la retención de los contenidos, a su enriquecimiento y a mantenerlo actualizado. Desde una perspectiva docente, los comentarios orientados a rebatir, a discutir o a entablar un debate en una formación e-learning favorece la dinamización y la atracción hacia el aprendizaje.
El docente: un aliado en la estrategia
Las empresas de formación e-learning en la actualidad no están aprovechando el rendimiento o las ventajas que la figura del docente puede aportar. De esta forma, el futuro del sector pone en evidencia una puesta en valor de los mentores de esta formación, siendo en muchos casos un elemento diferenciador, cuando su participación en el aprendizaje es activa.
El basto conocimiento sobre el área de la formación, unido a la necesidad que el alumno tiene de contar con una fuente de consulta profesional y experta, ponen al docente en un lugar destacado en los objetivos y estrategia de cualquier empresa de e-learning en el futuro.
El dato: ha llegado para quedarse
Ninguna organización en la actualidad es ajena al tratamiento de datos. Sin llegar a la complejidad de análisis que puede derivarse del uso de tecnología como el Big Data, el futuro de la formación e-learning tendrá en cuenta este aspecto. Y es que el dato ha llegado para quedarse.
Del análisis de datos se podrán extraer conclusiones medibles en cuanto al comportamiento del alumno, su grado de conocimiento y el posible impacto de cualquier iniciativa formativa. De esta forma, se podrá obtener una formación que sea considerada relevante por parte del alumnado, contribuyendo a un nivel más avanzado en la personalización en el aprendizaje.
La formación: el camino hacia el futuro profesional
El alumnado accede a la formación e-learning interesado en diferentes aspectos: acceder a puestos de mayor responsabilidad, insertarse en un sector laboral concreto, o incluso conseguir su primera experiencia profesional. El contenido formativo y el perfil profesional de cada alumno, nos da pistas sobre la intencionalidad en la formación.
Por lo tanto, uno de los objetivos y estrategia de una empresa e-learning, debe ser la de adaptar el contenido y contribuir a que afloren en los alumnos las capacidades o competencias profesionales que le preparen hacia el futuro profesional que les motivó a elegir la acción formativa concreta.
